La Trappe Quadruple 33Cl

Información técnica del producto La Trappe Quadruple

La Trappe Quadruple es una cerveza trapense de carácter profundo y elaborado que se distingue por su complejidad sensorial y su presencia robusta. Presenta una graduación alcohólica elevada, alrededor del 10% vol., lo que aporta calidez en boca sin eclipsar su refinada estructura de sabores. A nivel aromático, ofrece notas de caramelo oscuro, frutos secos, pasas, ciruelas maduras y un ligero toque especiado que recuerda al clavo y la nuez moscada. En boca, la experiencia es rica y envolvente: predominan matices maltosos tostados, con un dulzor elegante equilibrado por una leve acidez frutal. Su amargor, con un IBU moderado, se sitúa en un nivel que aporta equilibrio y evita que la cerveza resulte empalagosa, permitiendo apreciar con detalle la complejidad de sus ingredientes. La composición incluye maltas selectas de varias cocciones, lúpulos aromáticos tradicionales, agua pura de monasterio y levadura de alta fermentación, uno de los elementos más distintivos del estilo Quadruple. Su textura es densa, sedosa y con un final largo, cálido y ligeramente licoroso. La espuma, de color beige intenso y cremosa, completa la sensación de robustez que caracteriza a este producto. Es una cerveza ideal para maridar con carnes rojas, quesos curados, postres intensos o para degustar lentamente como una bebida de contemplación.

Historia y fabricante de La Trappe Quadruple

La Trappe Quadruple es producida por la cervecería trapense de la Abadía de Koningshoeven, ubicada en Berkel-Enschot, en los Países Bajos. Este monasterio, fundado en 1881, pertenece a la orden cisterciense de la estricta observancia, conocidos como los monjes trapenses, quienes han mantenido una tradición cervecera auténtica basada en trabajo manual, calidad y respeto por los procesos lentos. La fábrica nació como una solución económica para sostener al monasterio y sus obras, y rápidamente evolucionó hasta convertirse en una de las cervecerías monásticas más reconocidas del mundo. Su fundador, el monje Dom Nivardus Schweykart, inició la producción con métodos simples pero rigurosos, los cuales fueron perfeccionados por generaciones de monjes y artesanos. La Trappe es una de las pocas marcas autorizadas a llevar el sello Authentic Trappist Product, lo que certifica que la cerveza se produce dentro de un monasterio, bajo la supervisión directa de los monjes y con beneficios destinados a su mantenimiento y labores sociales. La fábrica combina hoy instalaciones modernas con un profundo respeto por la tradición, y continúa siendo gestionada bajo el espíritu monástico original. La gama de cervezas La Trappe es símbolo de equilibrio entre historia, autenticidad y excelencia técnica, atributos que definen también la identidad de su reconocida Quadruple.

Curiosidades de La Trappe Quadruple

La Trappe Quadruple posee diversas curiosidades que la convierten en una referencia imprescindible dentro de las cervezas trapenses. Una de las más destacadas es que fue la primera Quadruple comercializada del mundo, convirtiéndose en el modelo de referencia para todas las cervezas del estilo que surgieron posteriormente. Su creación buscaba ofrecer una cerveza excepcionalmente compleja pero equilibrada, capaz de expresar la tradición monástica con un carácter más intenso que sus versiones Dubbel y Tripel. Otro dato interesante es su capacidad de envejecimiento: La Trappe Quadruple mejora notablemente con el tiempo, desarrollando notas más profundas a caramelo, higos y especias, similar al comportamiento de ciertos vinos de guarda. Muchos aficionados la conservan durante años para apreciar cómo evoluciona la levadura y cómo se integran sus matices alcohólicos. Además, el monasterio produce ediciones especiales envejecidas en barricas de roble, whisky o vino, lo que añade capas adicionales de sabor y rareza. También es conocida por su ritual de servicio: debe servirse a una temperatura ligeramente templada y en copa ancha, permitiendo que el aroma se exprese plenamente. Su fama internacional la ha convertido en una cerveza de culto entre coleccionistas, gastrónomos y amantes de cervezas fuertes, consolidando su posición como una de las joyas del patrimonio cervecero monástico.