Corsendonk Grand Hops 33Cl
Corsendonk Agnus 33Cl
Corsendonk Blanche 33Cl
Corsendonk Pater 33Cl
Corsendonk Rousse 33Cl
La Gauloise Brune 33Cl
Tyris Original 33Cl
Waterloo Triple 33Cl
Filou 33Cl
La Chouffe 33Cl
Piraat Triple Hop 33Cl
Cuvee Des Trolls 33Cl
Petrus Brune Dubbel 33Cl
Tempelier Strong Amber 33Cl
Hommelbier 25Cl
Augustijn Donker 33Cl
Guldenberg 33Cl
Belzebuth Triple 33Cl
Ypra 33Cl
Bersalis Tripel 33Cl
Saison Dupont 33Cl
Orion The Draft 33,4 Cl
La Trappe Puur 33Cl
Brugge Triple 33Cl
Kirin Ichiban 33Cl
Houblon Chouffe 33Cl
Hacker Pschorr Munchner Hell 50Cl
Buffalo Belgian Bitter 33Cl
Baptist Blonde 33Cl
Magners Sidra Manzana 56,8 Cl
Paranoia 33Cl
Mythos 33Cl
Grimbergen Blonde 33Cl
Het Kapittel Abt 33Cl
Blanche Des Neiges 33Cl
Maredret Triplus 33Cl
Zeta Superhell 33Cl
Descripción técnica de Corsendonk Grand Hops
La cerveza belga Corsendonk Grand Hops es una bebida de fermentación alta que pertenece al estilo Belgian IPA, reconocida por combinar la tradición de las ales belgas con una presencia marcada de lúpulo moderno. Según la ficha técnica oficial, tiene una graduación de 6,9% vol. Su nivel de amargor, medido por el IBU, alcanza las 30 unidades, lo que proporciona un amargor equilibrado sin sobrepasar la elegancia de su perfil maltoso. En aroma destacan notas frutales y herbales provenientes del lúpulo Mistral de Alsacia, que aporta un matiz ligeramente cítrico y floral muy característico. En boca, la bebida ofrece un cuerpo medio, con una textura redonda y un retrogusto refinado gracias a la combinación de maltas belgas y lúpulos americanos y europeos. Su botella (33 cl) presenta una etiqueta sobria con estética dorada que evoca la riqueza del lúpulo, transmitiendo inmediatamente una sensación de calidad y cuidado en la elaboración. En conjunto, esta cerveza es ideal para quienes buscan una experiencia lupulada pero bien balanceada, que respeta la herencia belga sin renunciar a la modernidad del IPA.
Origen e historia de Corsendonk Grand Hops
La marca Corsendonk tiene su origen en Bélgica, inspirada por el priorato de Corsendonk en Oud‑Turnhout. La marca fue relanzada en 1982 por la familia Keersmaekers, recuperando recetas de tipo abbey con un espíritu moderno. Aunque el nombre Corsendonk remite a una antigua comunidad religiosa, la producción actual de muchas de sus cervezas, incluida la Grand Hops, se realiza en la histórica cervecería Brasserie Du Bocq, situada en Purnode, Bélgica. Este modelo de colaboración permite que la marca conserve su identidad tradicional, al tiempo que garantiza una producción rentable y distribuida mundialmente. El lanzamiento de Corsendonk Grand Hops se enmarca en la estrategia de la marca para ofrecer bebidas con carácter innovador, combinando lúpulos modernos con la tradición belga. Este enfoque ha permitido que la calidad del producto sea reconocida tanto por consumidores aficionados al lúpulo como por los amantes de las ales clásicas. Desde su introducción, ha ocupado un lugar destacado dentro de la gama de Corsendonk, consolidándose como una de las referencias más equilibradas entre tradición y modernidad.
Curiosidades y detalles distintivos de Corsendonk Grand Hops
Entre las curiosidades de Corsendonk Grand Hops destaca su uso del lúpulo Mistral de Alsacia, que es relativamente inusual en ales belgas tradicionales. Este lúpulo aporta un perfil herbáceo y cítrico más delicado, que se mezcla armoniosamente con la base de malta, proporcionando una complejidad menos agresiva que la de los IPA más extremos. A pesar de su carácter lupulado, su graduación del 6,9% y su IBU moderado la hacen muy bebible, incluso para quienes no están acostumbrados a cervezas muy amargas. Otra particularidad es que la marca Corsendonk, aunque fundada con raíces monásticas, ha sabido encontrar su lugar en la escena craft moderna ofreciendo bebidas que fusionan pasado y presente. La botella de Grand Hops mantiene un diseño elegante, con tonos dorados y un logotipo que refuerza su identidad histórica. Además, la cerveza ha sido bien valorada por su versatilidad de maridaje: funciona muy bien con platos especiados, pescados grasos o incluso postres ligeros gracias a su equilibrio. Este equilibrio entre tradición, carácter lupulado y estética refinada la convierte en una cerveza distintiva dentro del catálogo Corsendonk y en un puente ideal para quienes quieren disfrutar de ales clásicas y modernas.
