El Daiquiri es un icónico cóctel que ha dejado una huella duradera en la cultura de la coctelería. Originario de Cuba, este refrescante trago es un símbolo de la destreza y la creatividad de los bartenders. Su base consiste en una mezcla simple de tres ingredientes clave: ron blanco, jugo de limón fresco y azúcar, lo que resulta en una bebida equilibrada que combina la dulzura, la acidez y el espíritu del ron en perfecta armonía.

El Daiquiri se remonta al siglo XIX, cuando fue creado en el pueblo minero de Daiquirí, cerca de Santiago de Cuba. Sin embargo, su popularidad creció durante la década de 1930 gracias a figuras como Ernest Hemingway, quien lo disfrutaba en el bar El Floridita de La Habana. Con el tiempo, el Daiquiri ha evolucionado y se ha adaptado a diversas variantes, incluyendo el Daiquiri de fresa y otros sabores frutales.

Hoy en día, el Daiquiri sigue siendo un clásico atemporal en bares de todo el mundo, apreciado por su simplicidad y su capacidad para refrescar en climas cálidos. La versatilidad de este cóctel permite a los amantes de la coctelería experimentar con diferentes rones y variaciones, lo que lo convierte en una opción inagotable para aquellos que buscan disfrutar de un trago sencillo pero delicioso.